La palabra Usabilidad descrita por la ISO/IEC 9241, la podemos explicar como la efectividad, eficiencia y satisfacción con la que un producto permite alcanzar objetivos específicos a usuarios específicos en un contexto de uso específico. Esta descripción contiene tres palabras clave marcadas en cursiva:
- efectividad: la podemos describir como la precisión y plenitud con la que los usuarios alcanzan objetivos específicos. Se asocia la facilidad de aprendizaje.
- eficiencia: son los recursos (tiempo invertido) para lograr la precisión y plenitud con que los usuarios alcanzan los objetivos.
- satisfacción: es la ausencia de incomodidad y la actitud positiva en el uso del producto.
Vista la descripción de Usabilidad, nos podemos dar cuenta que es la palabra en la que gira nuestro mundo online. La palabra que describe perfectamente nuestro éxito o fracaso.
Cuando nos queremos referir a todo aquello que sirve como puente o canal para que los productos sean usados por los usuarios, como por ejemplo “El asa de una taza, el tablero de un automóvil, el sistema operativo de una computadora”, nos estamos refiriendo a la Interfaz. Una Interfaz hombre-máquina potente, nos ayudará a que las personas tengan un mayor control de todo lo que hacen y por lo tanto, su porcentaje de conversión aumenta considerablemente.
Entonces podemos afirmar que ¿Funcionalidad = Usabilidad?
No. Cualquier cosa diseñada que cumpla su función no necesariamente es usable. Es decir, la funcionalidad no da la garantía que los usuarios van a poder realizar sus tareas correctamente.
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